Los auriculares son unos pequeños aparatos electrónicos que sirven para recibir los sonidos procedentes de un reproductor. En la mayoría de los casos son utilizados para escuchar música. En este artículo queremos que conozcas los distintos tipos de auriculares que existen en el mercado.

Según los auriculares queden dentro o fuera de las orejas podemos hacer una clasificación de los mismos en externos o internos.

Los auriculares externos, como su nombre indica, quedan situados en la parte exterior de la oreja. Normalmente rodean la oreja con una almohadilla de espuma, más o menos ancha dependiendo de los modelos, para hacer más confortable su utilización.

Por su parte, los auriculares internos, también llamados intraaurales, son los que se colocan dentro del conducto auditivo. Los más conocidos son los llamados botones de oreja. En realidad quedan colocados en la entrada de la oreja, sin llegar a entrar en ella. Hay otros, los intraauriculares, que sí penetran en el canal auditivo.

Este tipo de auriculares son los que se suelen utilizar para hacer deporte o andar por la calle. Son discretos y se suelen acoplar de tal manera que no se mueven a pesar de que el usuario se mueva constantemente.

¿Qué es la Impedancia?

Una de las características técnicas fundamentales de los auriculares es la impedancia. La impedancia es la resistencia que crean las bobinas de los imanes del altavoz que hay en el auricular, que ejerce al paso de la corriente. Este dato figura en todos los auriculares y suele ser de 32, 16 y 8 ohmios.

En función de la impedancia, la potencia del reproductor es mayor o menor. Cuanta más impedancia tengan los auriculares, más dificultad tendrán esos cascos de ser alimentados correctamente con la salida de audio de los dispositivos. Es decir, a mayor impedancia, mayor potencia hay que suministrar a los auriculares para obtener un volumen y sonido adecuados.

Desde el punto de vista de la salud auditiva, es preferible utilizar auriculares de impedancia más alta para que la potencia sea más baja.

 

Los auriculares intraauriculares son más peligrosos

 Los auriculares internos son los más perjudiciales para la salud auditiva, porque se colocan más cerca del tímpano y, por lo tanto, aumenta el nivel de presión acústica. Cuando se introduce uno de estos dispositivos dentro del oído el volumen de aire que queda entre el auricular y la membrana timpánica (tímpano) es menor. Al reducir el volumen, aumenta la potencia de la música o sonido que se escucha. Esta mayor potencia puede lesionar la cóclea.

La mejor opción, si tenemos que utilizar auriculares, sería la de auriculares externos (supraaurales) y de impedancia alta.

 

Los auriculares pueden provocar pérdida de audición

Todos los auriculares deben ser utilizados con precaución ya que escuchar música a un volumen elevado durante mucho tiempo, afecta a la salud auditiva. La propia Organización Mundial de la Salud alerta del peligro que corren más de 1.000 millones de adolescentes en todo el mundo de quedarse sordos debido al uso inadecuado de los auriculares.

Según la OMS, la exposición a más de 100 decibelios durante 15 minutos, es ya una práctica insegura. Escuchar música sin peligro depende de varios factores;  la intensidad o el volumen del sonido y la duración y frecuencia de la escucha. Cuando la exposición es particularmente fuerte, regular o prolongada, puede conducir a un daño permanente de las células sensoriales del oído, provocando la pérdida irreversible de la audición.

Así que, si quieres escuchar música con auriculares, ten precaución con el volumen y con el tiempo que le dedicas a esta actividad. Protege tu salud auditiva.