La Relación entre la Diabetes, la Audición y el Equilibrio

La diabetes es una enfermedad del metabolismo en la que se produce un exceso de glucosa o azúcar en la sangre. Está producida por una disminución de la secreción de la hormona insulina o un mal funcionamiento de la misma. Después de varios años, las personas diabéticas pueden sufrir daños en los riñones, el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos y también en los oídos. Hoy, en nuestro blog de salud auditiva, hablamos de la relación entre la diabetes, la audición y el equilibrio

La Relación entre la Diabetes, la Audición y el Equilibrio

El estilo de vida sedentario está propiciando un incremento en el número de personas que, cada año, desarrollan diabetes. En nuestro país, unos 5 millones de personas son diabéticas. La prevalencia de la diabetes en España ha alcanzado el 14,8%.  Afecta a uno de cada siete adultos y es la segunda tasa más alta de Europa.

La mayor parte de los diabéticos, (un 90%) padece diabetes tipo 2. En el aumento de personas con diabetes tipo 2 influye el envejecimiento, los hábitos de vida sedentarios y el aumento de sobrepeso.

Las personas diabéticas tienen un 30% más de desarrollar problemas auditivos. La diabetes puede provocar pérdida auditiva o pérdida de equilibrio.

Esta enfermedad puede dañar los vasos sanguíneos y los nervios del oído interno lo que provoca que las señales nerviosas que transportan el sonido desde el oído interno hasta el cerebro, no lleguen correctamente, impidiendo que el cerebro pueda interpretarlas. Los daños en el oído suelen tener lugar en la cóclea, situada en el oído interno, lo que provoca una pérdida auditiva neurosensorial.

Por otra parte, el sistema vestibular, que se encuentra situado dentro del oído interno, también puede verse afectado por los problemas circulatorios. Este sistema se encarga de mantener el equilibrio y la postura además de coordinar los movimientos del cuerpo y la cabeza. Por este motivo, cuando el sistema vestibular resulta dañado, se producen fallos en el desequilibrio que pueden provocar caídas y accidentes.

Prevención y Tratamiento

La mejor manera de prevenir la aparición de la diabetes tipo 2 pasa por mantener unos hábitos de vida saludables. En este sentido, es muy importante realizar ejercicio cada día. El ejercicio y una dieta adecuada pueden evitar el sobrepeso. Recordemos que el sobrepeso es uno de los factores que  influyen en el desarrollo de esta enfermedad.

La Federación Española de Nutrición detalla cuál es el tipo de dieta que deberían llevar las personas con diabetes. Se trata de una dieta variada, equilibrada y moderada.

Recomiendan acudir al médico para que, en función de las características de cada persona y su estilo de vida, aconsejen una dieta específica. Los expertos recomiendan un tratamiento nutricional que mantenga la glucemia, normalice el perfil lipídico y que evite posibles complicaciones.