Usar protectores auditivos en determinados entornos laborales, vigilar el volumen de los reproductores de música, evitar exponerse a ruido elevado durante un tiempo prolongado y revisiones periódicas de los oídos, son requisitos obligados para conservar la salud auditiva.

Hoy, 29 de abril, es el día Internacional de la Concienciación sobre el Ruido. Se trata de un día que se promovió con el objetivo de concienciar y promover el cuidado del ambiente acústico, la conservación de la audición y la concienciación sobre las molestias y daños que generan los ruidos. En nuestro país está promovido por la Sociedad Española de Acústica.

Audiocentro, consciente de la importancia que una correcta audición tiene para el desarrollo del individuo y para lograr una saludable relación con el mundo que le rodea, se manifiesta en este día a favor de una vida sin Contaminación Acústica.

No obstante, de manera paralela, sigue trabajando de cara a la protección de nuestros oídos ante el ruido que nos rodea.

El impacto del ruido en la audición, la salud y la calidad de vida, está totalmente aceptado y demostrado por un gran número de estudios científicos y médicos. Por eso, para lograr una correcta salud auditiva, Audiocentro recomienda el uso de protectores auditivos a medida en entornos laborales donde el ruido es muy elevado. En determinadas industrias, en la construcción, transportes y en zonas de ocio y restauración, es conveniente el uso de tapones antirruido.

El ruido del vecindario, incluido dentro del ruido urbano, procedente de locales (restaurantes, cafeterías, discotecas…), música, deportes, áreas de juegos y animales domésticos (el ladrido de los perros), también nos afecta. En determinadas situaciones, especialmente para conciliar el sueño, es recomendable la utilización de los tapones protectores.

El uso de medidas alternativas para evitar estos ruidos, como el uso de algodón, son medidas incómodas, antihigiénicas y que no logran silenciar los ruidos de manera eficaz.

Audiocentro asegura que la pérdida de audición debida al ruido se puede prevenir. Por ello, recomienda tener mucho cuidado con el volumen excesivo de los auriculares, la televisión o en cualquier otro reproductor de sonido.

No es aconsejable la exposición de los oídos a ruidos elevados durante un tiempo prolongado, así como las exposiciones, aunque breves, a ruidos superiores a los 85dB, ya que pueden ocasionar pérdidas de audición irreversibles.

Por último, es fundamental someterse a revisiones periódicas de los oídos, mediante la realización de tests auditivos, que prevengan posibles problemas de audición.

 

La Contaminación Acústica

Según la Real Academia, ruido es un sonido inarticulado (con el que no se forman palabras), por lo general, desagradable.

El ruido está considerado como un agente contaminante del mundo moderno. Un agente contaminante “invisible” que se debe regular y controlar.
El ruido produce efectos negativos en el ser humano, tanto fisiológicos como psicosomáticos, y constituye un grave problema medioambiental y social.

Muchos países han reglamentado el ruido urbano del tránsito de aviones y autos, maquinaria de construcción y plantas industriales a través de normas de emisión y reglamentos para las propiedades acústicas de los edificios. Pero pocos países tienen reglamentos para el ruido urbano del vecindario, probablemente debido a la falta de métodos para definirlo y medirlo y la dificultad de controlarlo.

Desde 1980, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha abordado el problema del ruido urbano.

 

Los efectos del ruido sobre la salud

 

Los efectos adversos que el ruido provoca sobre la salud están estudiados y comprobados. Son los siguientes:

Efectos sobre la audición: La incapacidad para comprender el habla genera problemas personales y cambios en la conducta. Los grupos particularmente vulnerables a las interferencias auditivas son los ancianos, los niños que están en el proceso de adquisición de la lengua y de la lectura y los individuos no familiarizados con el lenguaje que están escuchando.

Efectos sobre el sueño:

El ruido ambiental produce trastornos del sueño importantes. El sueño ininterrumpido es un prerrequisito para el buen funcionamiento fisiológico y mental. Los efectos primarios del trastorno del sueño son dificultad para conciliar el sueño, interrupción del sueño, alteración en la profundidad del sueño, cambios en la presión arterial y en la frecuencia cardíaca, incremento del pulso, vasoconstricción, variación en la respiración, arritmia cardíaca y mayores movimientos corporales.

Efectos sobre las funciones fisiológicas. La exposición al ruido puede tener un impacto permanente sobre las funciones fisiológicas de los trabajadores y personas que viven cerca de aeropuertos, industrias y calles ruidosas. Después de una exposición prolongada, los individuos susceptibles pueden desarrollar efectos permanentes, como hipertensión y cardiopatía asociadas con la exposición a altos niveles de sonido.

Efectos sobre la salud mental. El ruido ambiental no causa directamente enfermedades mentales, pero se presume que puede acelerar e intensificar el desarrollo de trastornos mentales latentes. Los estudios sobre el uso de medicamentos, tales como tranquilizantes y pastillas para dormir, síntomas psiquiátricos y tasas de internamientos en hospitales psiquiátricos, sugieren que el ruido urbano puede tener efectos adversos sobre la salud mental.

Efectos sobre el rendimiento. Se ha demostrado que el ruido puede perjudicar el rendimiento de los procesos cognitivos, principalmente en trabajadores y niños. Entre los efectos cognoscitivos más afectados por el ruido se encuentran la lectura, la atención, la solución de problemas y la memorización.

La lucha contra el ruido precisa, por tanto, de la concienciación y colaboración ciudadanas, así como de una implicación decidida y eficaz de las administraciones competentes, con una legislación y normativas adecuadas.

 

Audiocentro pide concienciación

Mantener la salud auditiva depende de la prevención, de un cuidado periódico de nuestros oídos y de minimizar la contaminación acústica que nos rodea.

Aunque parece complicado eliminar el ruido que nos rodea, y que se deriva de la manera en la que desarrollamos nuestra actividad diaria, sí creemos que debe haber una mayor concienciación por parte de las diferentes administraciones, así como de los propios individuos. El respeto hacia nuestros vecinos y la gente que vive a nuestro alrededor es fundamental para minimizar el ruido doméstico que generamos.

En Audiocentro trabajamos cada día para mejorar la salud auditiva de muchas personas. El sentido del oído es fundamental para relacionarnos con nuestro entorno y no quedar aislados. Sin embargo, un día como hoy, queremos hacer hincapié en que no sólo debemos cuidar nuestros oídos. Tan importante como su cuidado es trabajar para que, lo que les llegue a nuestros oídos, y por tanto, lo que podamos sentir, sean sonidos agradables y no ruidos perjudiciales para nuestra salud física y psíquica.