La pérdida de audición puede deberse a causas congénitas o adquiridas. Entre las segundas, tal y como señala la Organización Mundial de la Salud, se encuentra el uso de determinados medicamentos. Especialmente los medicamentos ototóxicos.

En las últimas semanas hemos conocido también que otras sustancias, en principio beneficiosas para nuestro organismo, pueden ser perjudiciales para nuestra salud auditiva.

Una investigación llevada a cabo entre un grupo de mujeres durante los últimos años, indica que las mujeres que usaron de manera continuada ibuprofeno o paracetamol durante 6 años o más, tenían un mayor riesgo de pérdida auditiva que aquellas que usaron estos medicamentos de forma continuada durante un año o menos.

Los resultados de esta investigación, llevada a cabo por el equipo del Dr. Gary Curhan, del BWH (Brigham and Women’s Hospital) en Boston, Estados Unidos, se suman a otros estudios que relacionan el uso excesivo de analgésicos con la pérdida auditiva.

El estudio, que hemos conocido gracias a la Asociación Nacional de Audioprotesistas (ANA), fue posible gracias a los datos obtenidos de más de 54.000 mujeres con edades comprendidas entre los 48 y los 73 años. Los investigadores analizaron la información disponible sobre el consumo de aspirina, ibuprofeno y paracetamol sobre la pérdida auditiva declarada por las mujeres.

Según las conclusiones del estudio, un uso de ciertos analgésicos durante un tiempo muy prolongado parece promover la pérdida auditiva en mujeres.

No se trata de un porcentaje excesivo (según el doctor Curhan se hablaría de un 5,5%) pero sí es cierto que el uso de ibuprofeno y paracetamol es muy habitual entre la población.

Medicamentos y salud auditiva

Entre los medicamentos a los que hacíamos referencia que pueden causar pérdida de audición, se encuentra el grupo de los ototóxicos. Se trata de medicamentos que se utilizan para tratar infecciones graves, cáncer y enfermedades de corazón.

La pérdida de audición se puede deber a que el citado fármaco puede dañar las células sensoriales de la cóclea del oído interno.

Entre los medicamentos ototóxicos que causan un daño permanente se incluyen ciertos antibióticos aminoglucósidos , en particular, la gentamicina, estreptomicina y neomicina, y los fármacos usados en quimioterapia para el tratamiento del cáncer como la ciclofosfamida, cisplatino, bleomicina y carboplatino.

Antes de comenzar a tomar algún medicamento ototóxico es aconsejable realizarse una revisión auditiva y solicitar pruebas periódicas para comprobar el estado de la salud auditiva.