Son muchas las personas que en los próximos días cogerán el coche para disfrutar de unos días de vacaciones. Antes de salir de viaje es conveniente revisar el vehículo para comprobar que todo está correcto y evitar problemas que puedan provocar un accidente. Se trata de una buena práctica que, sin duda, deberíamos aplicar también al conductor.

La persona que se pone al frente del volante tiene una gran responsabilidad en sus manos. Su estado físico debe ser óptimo para que sus sentidos obtengan una información correcta de lo que sucede en la carretera. Gran parte de la información que obtiene el conductor procede de la vista. Sin embargo, la audición también es importante en la carretera.

Los oídos deben permanecer alerta  porque complementan la información visual y ayudan al cerebro a completar lo que sucede. Oír que un vehículo se acerca por detrás, la sirena de una ambulancia o el claxon de alguien que avisa o pide precaución, hace que podamos reaccionar con tiempo suficiente para tomar una decisión correcta.

Presbiacusia

El paso de los años se hace evidente en el cuerpo humano. Perdemos habilidades y dejamos, entre otras cosas, de poder ver y oír correctamente. La pérdida de vista que se produce como consecuencia de la edad se llama presbicia y se corrige con gafas o lentes de contacto. La pérdida de audición que se produce como consecuencia de la edad se llama presbiacusia y se corrige con audífonos.

Darse cuenta lo antes posible de esa pérdida o merma en nuestros sentidos, es importante para poder ponerle remedio cuanto antes y evitar que la pérdida vaya a más. Del mismo modo que acudimos al especialista a revisar nuestra visión, también debemos someternos de manera periódica a una revisión auditiva.

Para poder seguir haciendo las mismas actividades que siempre, como por ejemplo conducir, y hacerlo con la seguridad de siempre, es importante cuidar nuestros sentidos.

Conducción y Audición

Las personas mayores de 65 años que disponen de carnet de conducir deben renovarlo cada cinco años. Para poder renovarlo, deben pasar una serie de pruebas de visión, audición y coordinación.

La Dirección General de Tráfico establece que si un conductor tiene una pérdida de agudeza auditiva combinada en ambos oídos mayor del 45%, se deben adoptar unas precauciones especiales tales como llevar en el vehículo un espejo panorámico interior y retrovisores en ambos lados del vehículo. Si la pérdida de agudeza auditiva combinada es superior al 35%, no se pueden obtener o prorrogar permisos de conducción profesionales.