El 75 por ciento de los habitantes de ciudades industrializadas padecen algún grado de sordera o pérdida auditiva causada por la exposición a sonidos de alta intensidad. Así lo ha dado a conocer recientemente la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello.

Son muchos los ruidos a los que los habitantes de las ciudades están expuestos en su día a día. Ruidos elevados y estridentes como los que producen las máquinas pesadas, el tráfico urbano, el aéreo, el ruido de los bares o restaurantes o nuestro propio reproductor de música.

Ruido al que, aparentemente nos acostumbramos, pero que afecta a nuestra salud. Las consecuencias aparecen tarde o temprano.

 

Consecuencias del ruido en el cuerpo humano

Según un estudio de la Universidad de Pensilvania, si nos exponemos a demasiado ruido durante demasiado tiempo, el cuerpo reacciona para defenderse de lo que considera una agresión. El sonido del tráfico, tan común en las grandes ciudades, puede llegar a convertirse, en función del tiempo y la intensidad, en una causa que haga saltar el resorte.

Las alarmas se encienden y el cuerpo se pone en alerta. Reacciona produciendo un gran número de hormonas del estrés. Este tipo de hormonas asociadas al ruido elevado, y entre las que destaca la adrenalina, incrementan el ritmo cardiaco y desarrollan glucosa en el torrente sanguíneo para favorecer la lucha contra las amenazas detectadas.

Si el cuerpo está sometido a ruido durante la noche, el problema se agrava. El cuerpo sigue reaccionando como si estuviera sufriendo algún tipo de ataque y produce más hormonas del estrés. Según un estudio publicado en el European Heart Journal, las personas insomnes tienen tres veces más posibilidades de sufrir una insuficiencia cardíaca que los que duermen a pierna suelta.

 

La importancia del sueño

El ser humano necesita dormir para poder afrontar la actividad diaria. Pero no sólo se trata de dormir, si no hacerlo bien para lograr que el cuerpo descanse. El sueño repara todos nuestros órganos, ya que durante el tiempo que dura, nuestro organismo libera hormonas, entre otras la hormona del crecimiento, que mejoran el estado general del organismo.

 Dormir bien refuerza nuestro sistema inmunológico y nos hace más fuertes frente a las agresiones externas, tanto físicas como emocionales. Cuando el cuerpo se relaja, se produce melanina y serotonina. Ambas hormonas contrarrestan los efectos de las hormonas del estrés.

Otro de los estudios realizados concluye que las personas que están sometidas a ruidos por la noche sufren modificaciones en su metabolismo y su salud mental. Tanto su energía como habilidad se ver mermados como consecuencia de esto.

El ruido del tráfico cercano a nuestra vivienda, el sonido de la televisión de nuestros vecinos o la estridencia repentina de las sirenas de policía o las ambulancias durante la noche, son ruidos habituales en las grandes ciudades.

En ocasiones, la única la solución pasa por utilizar tapones para los oídos.

Los tapones actuales son muy cómodos porque se realizan a medida. De esta manera se ajustan al conducto auditivo de cada individuo logrando un doble objetivo: un aislamiento total de los ruidos exteriores y una absoluta comodidad.

Para proteger tu descanso y, en definitiva, tu salud, utiliza tapones a medida de Audiocentros.