A la hora de comenzar un nuevo curso escolar es importante comprobar que el niño sigue manteniendo una buena salud auditiva. Una parte importante de la información que nos llega lo hace a través del oído. Por eso es fundamental que cumpla su función y haga llegar los mensajes al cerebro sin problemas para que éste los pueda interpretar de manera correcta.

El fracaso escolar está directamente relacionado con problemas en el aprendizaje. Y en ocasiones un problema en la audición puede ser la causa de que el niño tenga dificultades para seguir el ritmo de los compañeros. Oír mal en clase provoca que el alumno deba realizar un sobreesfuerzo. Esto motiva una disminución en la atención y finalmente una bajada en su rendimiento escolar.

La función de los profesores es muy importante para descubrir las causas del bajo rendimiento. Pero las familias también deben estar atentas a determinadas señales. Algunas de las más comunes son que el niño tarda en responder cuando se le llama, pide con frecuencia que se le repita la pregunta que le hemos hecho, ve la televisión a un volumen elevado o se queja de algún oído. Ante estas señales, no hay que perder tiempo para revisar su salud auditiva.

¿Demasiado ruido en verano?

Las actividades que se realizan en verano pueden afectar la salud auditiva de los niños. La exposición a un exceso de ruido es una de las más comunes.

Utilizar auriculares para escuchar música o jugar con videojuegos es una práctica habitual entre la población juvenil y, cada vez más, entre los niños. Durante los meses de vacaciones las costumbres se relajan y el tiempo que se dedica a este tipo de actividades se alarga.

Los auriculares en sí no son un problema. El problema se deriva de utilizarlos sin regular el volumen. Si este es excesivo y/o el tiempo de exposición es demasiado prolongado, se dañan las células ciliadas del oído. Estas células son muy sensibles y las encargadas de hacer posible la audición. Las células dañadas no se recuperan por lo que la pérdida de audición se torna definitiva.

La pérdida de audición motivada por la exposición a un exceso de decibelios afecta a la población cada vez más joven de todo el mundo. Prevenir es muy importante para evitarlo, pero las revisiones auditivas también ayudan a detectar los problemas antes de que sea tarde.

Revisiones Auditivas

Someterse a una revisión auditiva es la mejor manera de descartar cualquier problema de audición, también en los niños. Se trata de  pruebas rápidas e indoloras que resultan determinantes para  descubrir o descartar un problema auditivo.

En Audiocentro disponemos de los profesionales más preparados y la más moderna tecnología para revisar la audición de los niños. Ahora que comienza el curso, pide cita y revisa su audición.