Qué hacer ante la Rotura del Tímpano
El tímpano es una membrana que separa el oído externo del oído medio. Su función consiste en trasladar las ondas sonoras procedentes del exterior a los pequeños huesos del oído interno. La membrana es muy delgada y puede llegar romperse provocando dolor, disminución de la audición, vértigos y facilitando las infecciones auditivas. Aunque suele ser más habitual en niños, personas de cualquier edad pueden sufrir rotura de tímpano. Por eso, es importante saber qué hacer ante la rotura del tímpano.
Qué hacer ante la Rotura del Tímpano
El tímpano se puede romper por diferentes causas. Un ruido elevado y repentino, como el de una explosión o un disparo, puede provocar que el tímpano se rompa. También un cambio brusco de presión puede provocar un barotraumatismo, afectando a esta delicada membrana. Las personas que realizan submarinismo deben tener mucho cuidado para ir equilibrando la presión del aire al descender o ascender. Algo similar deben hacer los pasajeros de un avión durante el despegue o el aterrizaje. En este último caso es aconsejable permanecer despiertos y masticar chicle o bostezar.
Las diferencias de presión entre el aire que hay a ambos lados del tímpano pueden provocar que este se abombe hacia un lado u otro. Cuando la diferencia es muy elevada, la membrana puede llegar a quebrarse.
Los golpes en el oído o en la cabeza también pueden provocar la rotura del tímpano, así como las otitis externas mal curadas. La introducción de objetos en el conducto auditivo, como los bastoncillos de algodón, suponen un riesgo muy importante para los oídos.
Sea cual sea el origen del problema, es preciso saber qué hacer y cómo actuar ante la rotura del tímpano.
Consecuencias del Tímpano Roto
Las personas que sufren la rotura del tímpano suelen sentir un dolor intenso y un zumbido fuerte en el oído. Esto les puede generar mareo, sensación de malestar y pérdida de audición.
Lo normal es que estos síntomas desaparezcan después de unas horas. Si esto es así, no es preciso acudir al médico. El tímpano tiene la capacidad de cerrarse por sí solo a las pocas semanas.
Sin embargo, en algunos casos, el dolor del oído, el mareo y la pérdida de audición se mantiene en el tiempo. Se hace preciso entonces acudir al profesional para que pueda observar el estado del tímpano y determinar la utilización de antibióticos que eviten el desarrollo de alguna infección.
Cuando el tímpano no sana por sí solo, la solución puede pasar por la utilización de un parche que estimula la cicatrización. En otras ocasiones, puede ser recomendable una cirugía para resolver la situación. El procedimiento quirúrgico más común se llama timpanoplastia y se lleva a cabo en el ambulatorio.
Aunque la audición no tiene por qué verse afectada tras la ruptura del tímpano, las revisiones auditivas periódicas pueden ser aconsejables para comprobar el estado de la salud auditiva.