Ahora que se acerca el fin de año, es habitual hacer balance del año que ha pasado y prepararse para el nuevo. Son muchas las personas que aprovechan la noche de fin de año para plantearse nuevos retos como dejar de fumar o empezar a practicar deporte. Desde Audiocentro estamos convencidos de que el mejor propósito para el año nuevo es proteger la salud auditiva. Y desde este blog, y desde cada uno de nuestros centros de salud auditiva te ayudaremos a lo largo de los próximos meses para que lo consigas.

Proteger la Salud Auditiva

Proteger la salud auditiva pasa por evitar los riesgos que nos rodean y que pueden afectar a corto, y también a medio plazo, a la audición.

El riesgo más evidente para la audición a corto plazo tiene que ver con el ruido impulsivo. Este ruido se caracteriza por ser de gran intensidad y producirse en un espacio muy breve de tiempo. Un ejemplo de ruido impulsivo es el que producen los petardos. También las armas de fuego provocan este tipo de ruido.

El ruido impulsivo puede provocar un trauma acústico si se produce cerca de una persona. El ruido entra sin ningún impedimento al interior del oído provocando daños en las células ciliadas que son fundamentales para trasladar al cerebro las señales eléctricas y que éste pueda finalizar el proceso de la audición.

La manera de evitar problemas auditivos debido al ruido impulsivo pasa por la prevención. Esto es, por la protección auditiva ya sea con auriculares especializados, como los que utilizan los cazadores, o manteniéndose a una distancia segura de los petardos.

Riesgos a Medio Plazo para la Audición

El ruido es el gran peligro para la audición en nuestros días. Todo el ruido que supere los 85 decibelios es agresivo para la audición. El problema es que los efectos del mismo no se producen de un día para otro, sino que aparecen pasado el tiempo. El tráfico es la fuente principal de ruido. Hay personas, especialmente en las grandes ciudades, que viven expuestas al ruido del tráfico.

A este ruido hay que sumarle el ruido que genera otro tipo de transportes como los aviones o los trenes. Las sirenas de ambulancias, los martillos neumáticos de las obras, las máquinas sopladoras o cortacésped de los jardineros, el ruido de las fábricas o la música en bares y discotecas conforman un cóctel explosivo para la salud auditiva.

Un riesgo muy importante para la salud auditiva de la población más joven pasa por el uso de auriculares. Especialmente los auriculares de botón, que se introducen en el conducto auditivo, están provocando el envejecimiento precoz de la audición en esta población que está reportando pérdida auditiva años antes de lo que venía siendo habitual.

Proteger la Salud Auditiva en el Nuevo Año

Para poder disponer de una buena salud auditiva durante mucho tiempo, es necesario evitar las agresiones a las que están sometidos los oídos. Como veíamos, el exceso de decibelios es una de ellas. Pero hay otras.

Hay que evitar introducir bastoncillos de algodón o cualquier otro objeto en los conductos auditivos para limpiarlos. Los oídos se limpian por sí solos. El agua de la ducha es lo único que necesitan y sólo hay que secar con una toalla el exterior del conducto auditivo.

En verano, o a lo largo del año si practicamos algún deporte acuático, puede ser una buena opción utilizar tapones para el agua a medida. De esta manera se evita que accedan bacterias y proliferen favoreciendo el desarrollo de otitis que puede afectar a la audición.

En todo caso, las revisiones auditivas son muy importantes, especialmente a partir de los 45 años y siempre que se detecten problemas de audición. Conocer a tiempo una pérdida auditiva es la mejor manera de ponerle solución y evitar que afecte al bienestar físico y emocional de las personas.

En el nuevo año, el mejor propósito pasa por proteger tu audición. Y recuerda que en Audiocentro podemos ayudarte a conseguirlo. ¡Feliz Año Nuevo!