Hoy en día un diagnóstico de sordera o hipoacusia en un niño no es algo que pueda destrozar la vida del niño ni de su familia. Con un tratamiento adecuado la mayoría de los niños pueden oír y mantener un contacto sin problemas con su entorno. Sin embargo, como ya hemos comentado en alguna otra ocasión, el diagnóstico precoz es fundamental para tratar el problema lo antes posible.

Para los niños, oír es algo básico para poder desarrollar las capacidades lingüísticas y del habla. Por este motivo los fallos en la audición pueden ser la causa de problemas en el aprendizaje que lo pueden limitar en las siguientes etapas de su vida.

Las investigaciones demuestran que los niños a los que se les proporciona una amplificación adecuada antes de los seis meses de edad pueden desarrollar sus capacidades lingüísticas igual que sus compañeros con audición normal. Sin embargo, a partir de esa edad los niños no tienen las mismas oportunidades. No obstante, con trabajo y esfuerzo se puede llegar a conseguir unos niveles que mejoren la calidad de vida de los pequeños.

Los profesionales son los que mejor van a poder orientar a los padres sobre los pasos a dar en cualquier caso. Por otra parte, mantener un contacto con padres que han pasado o están pasando por la misma situación, suele ser muy positivo.

Con este motivo se han ido creando asociaciones en todo el país en las que, además de compartir información sobre asuntos relacionados con la audición (avances médicos, pruebas, diagnósticos…) también sirven para estrechar lazos entre familias que comparten problemas, inquietudes y dudas en su día a día.

FIAPAS surgió en 1978 para dar respuesta a las necesidades que se plantean a las familias de las personas con discapacidad auditiva y a los propios afectados. Es una confederación de ámbito nacional, integrada por 46 entidades confederadas, que constituyen la mayor plataforma de representación de las familias de personas sordas en España.

 

Las familias necesitan información y apoyo

 

Los padres tienen el derecho a ser informados, orientados y apoyados con los medios externos que en cada momento sean necesarios, así como la responsabilidad de velar por la educación y la salud de sus hijos y de sus hijas, y de tomar las decisiones que favorezcan su formación y su crecimiento en un positivo clima familiar.

Desde el momento en que se sospecha que su hijo puede tener problemas en su audición, las familias deben contactar con los distintos profesionales y, en estrecha colaboración con ellos, emprender una tarea común.

Otra asociación que pretende dar respuesta a personas con deficiencia auditiva es Clave. Ha creado un espacio en el que intercambiar ideas, hacer propuestas e informar sobre los nuevos avances tecnológicos o sobre los nuevos servicios disponibles para cubrir diferentes necesidades de la vida diaria.

Clave, cuya sede se encuentra en Madrid, organiza, de manera periódica, talleres formativos y orientativos para padres, profesionales y también para niños.

El próximo taller está dirigido a los padres y tendrá lugar el 11 de marzo. En el mismo se intercambiarán experiencias sobre la integración escolar. Si quieres asistir solamente tienes que inscribirte. Puedes informarte en su web.