Día Mundial del Buceo y la Salud Auditiva
Cada 7 de septiembre se celebra el día mundial del buzo para reconocer la labor de estos profesionales que realizan su labor sumergidos en entornos acuáticos (ríos, canales, mar…). Labores de inspección, investigación, mantenimiento o búsqueda de personas entre otras, que precisan de personas bien entrenadas y que dominen perfectamente la técnica del buceo. En los últimos años, el buceo también se ha convertido en una actividad de ocio para poder disfrutar del fondo del mar. Aunque es una práctica cada vez más extendida, hay que tener en cuenta que conlleva riesgos para los oídos. Hoy hablamos del día mundial del buceo y la salud auditiva.
Día Mundial del Buceo y la Salud Auditiva
Debido precisamente a que la actividad del buceo recreativo es una práctica cada vez más implantada en nuestro país, en el año 2020 se aprobó una nueva legislación de buceo recreativo. El llamado turismo de buceo atrae a miles de personas a las costas españolas. Con el fin de salvaguardar la seguridad y salud de los usuarios, se estableció una edad mínima para el buceo, unas condiciones físicas obligatorias, la necesidad de formación para realizar la actividad, así como unas normas de seguridad específicas.
El buceo recreativo establece como edad mínima los 8 años para practicar la actividad y limita los metros a los que se puede descender, en función de la edad del participante hasta un máximo de 40 metros que es el límite permitido en la modalidad de buceo recreativo.
Bucear, incluso hasta el límite de 40 metros, puede afectar a los oídos. De hecho, es frecuente sentir molestias en los oídos durante o después de la inmersión. Por eso hay que tener cuidado y conocer las reglas básicas para que los riesgos sean mínimos.
Barotrauma y Salud Auditiva
El principal riesgo para los oídos que se desprende de la práctica del buceo es el barotrauma. Conforme la persona desciende hacia el fondo del mar, la presión que ejerce el agua sobre el oído se incrementa. Para evitar que esa presión se mantenga en el tiempo y pueda dañar el tímpano, es necesario equilibrar la presión del interior del oído con la del exterior.
Hay dos maniobras que pueden ayudar a conseguirlo; la maniobra Vasalva y la maniobra Toynbee. La primera consiste en soplar manteniendo la nariz tapada, mientras que la segunda consiste en tragar saliva con la nariz tapada.
Es muy importante que, antes de bucear los conductos nasales y auditivos se encuentren limpios y despejados para y lograr un mejor equilibrio de la presión.
Las recomendaciones de los instructores son fundamentales para evitar graves problemas. Estos tienen que conocer el estado de salud de las personas antes de que puedan bucear. Es importante que conozcan cualquier problema relacionado con los oídos para que determinen si es conveniente o no permitir a la persona realizar la actividad.
Una vez llevada a cabo la inmersión se pueden sentir molestias en los oídos. Es normal que suceda. Sin embargo, si después de unos días no remite o aparece un dolor más pronunciado, es preciso acudir al médico para que valore la situación.
En nuestros centros de salud auditiva de Audiocentro llevamos a cabo revisiones auditivas para conocer el estado de la salud auditiva del paciente. Es conveniente realizar una revisión de manera periódica y siempre que aparezcan problemas o se produzca una modificación de la audición. Nuestros profesionales podrán informarte y aconsejarte cómo disponer de la mejor salud auditiva. ¡Pide cita!