Esta semana hemos conocido el caso de un hombre de 55 años, conductor de mercancías peligrosas, que ha conseguido la incapacidad permanente total debido a que su discapacidad auditiva le impedía poder seguir conduciendo con seguridad. Durante un examen de renovación del permiso de conducir, el centro de reconocimiento de conductores le calificó como no apto para los permisos C1, EC1, C, EC, D1, ED1, D y ED, necesarios para el ejercicio de su profesión.

Salud Auditiva para Conducir

A pesar de que la vista es fundamental para llevar a cabo una conducción segura (el 90% de la información que procesa el conductor, procede de los ojos), una correcta audición contribuye a una mayor seguridad durante la conducción.

Los oídos ofrecen información al conductor de lo que sucede dentro y fuera del vehículo. Gracias a ellos podemos saber que una puerta está mal cerrada, que hemos dejado puesto el intermitente o que no llevamos el cinturón de seguridad. Hoy en día los vehículos avisan al conductor de que algo sucede en el vehículo a través de señales luminosas y también de señales sonoras.

Los oídos juegan un papel importante al circular por carretera ya que, gracias un óptimo funcionamiento de los mismos podemos saber si se acerca una moto, si pide paso una ambulancia o si otro vehículo nos está adelantando.

En cualquiera de estos casos, que el conductor cuente con una buena audición, es clave para facilitar la circulación del resto de vehículos y para evitar cualquier accidente. Y es que, disponer de una buena salud auditiva le permite al conductor contar con un tiempo extra para reaccionar ante cualquier imprevisto.

Conducir con Hipoacusia

Para obtener el permiso de conducir es preciso pasar una revisión médica que incluye una revisión auditiva. Esta última comprende una otoscopia, que es un examen desde el oído externo hasta el tímpano, y una audiometría que permite al profesional evaluar el funcionamiento del sistema auditivo.

En nuestro país es posible conducir con hipoacusia, dependiendo de los niveles de pérdida auditiva. Si esta es menor del 45% en ambos oídos, la persona podrá obtener un permiso para conducir vehículos no profesionales. Si la pérdida de agudeza auditiva combinada en ambos oídos es mayor del 45%, los vehículos deberán contar con un espejo panorámico interior y retrovisores en ambos lados.

Cuando la pérdida de agudeza auditiva combinada es superior al 35%, no se podrá obtener el permiso de conducir ni una prórroga del mismo para el grupo 2º, esto es, para los vehículos profesionales.

Es fundamental que las personas usuarias de audífonos comprueben sus pilas antes de subir al vehículo, especialmente en viajes largos. También es conveniente evitar el ruido dentro del vehículo. Las conversaciones y el volumen de la radio deben mantener un nivel moderado. Esta recomendación es útil tanto a personas con alguna discapacidad auditiva como a personas sin ella.