Una de las mejores opciones, y de las más divertidas cuando aprieta el calor, es acudir a un parque acuático. Estos parques son lugares que aúnan agua y diversión. Son ideales para todas las edades aunque, dependiendo de la altura de cada niño, éste podrá acceder a unas atracciones u otras por motivos de seguridad.

Hay parques acuáticos en muchos lugares de nuestro país. Trip Advisor realizó una encuesta entre sus usuarios para que valoraran los parques y poder realizar una clasificación de los mismos. Según los resultados, estos son los 10 mejores parques acuáticos de España.

Aunque las autoridades sanitarias vigilan muy de cerca la calidad del agua de estas instalaciones, son muchas las personas que, cada día, disfrutan de estos parques. Para evitar problemas, y posibles contagios, el agua es tratada con cloro y otros productos químicos. Son productos agresivos que pueden afectar a las personas más sensibles.

Cuidado con los oídos

En este sentido, es conveniente evitar que los niños que han sufrido otitis, o son propensos a sufrirla, se pasen el día dentro del agua sin ninguna protección.  Lo mejor en estos casos, es disponer de unos tapones de baño, y si pueden ser tapones a medida, mejor.

Los tapones a medida son cómodos ya que se adaptan perfectamente al conducto auditivo de cada usuario. De esta manera los niños no se quejarán por tener que llevarlos y evitaremos que el agua entre en el oído.

Es conveniente descansar de vez en cuando. Cada cierto tiempo se debe parar para comer algo ligero (ya que en estos sitios es muy difícil obligar a los niños a cumplir el tiempo de digestión) y beber agua ya que, aunque todo el día estemos en el agua, el cuerpo está sometido al sol y al ejercicio, y también necesita hidratarse “por dentro”.

Estos momentos deben aprovecharse para darse protección solar y evitar así las quemaduras que se pueden originar al estar todo el día bajo el sol y en contacto con el agua. No olvidemos que el agua actúa como si fuera una lupa e incrementa el riesgo de quemaduras en la piel si no la protegemos.

Seca los oídos siempre que puedas

Podemos aprovechar también estos tiempos de descanso para secar los oídos. Es conveniente hacerlo con una toalla y evitar introducir en el conducto auditivo bastoncillos o cualquier otra cosa similar. Al término de la jornada se puede utilizar también un secador para lograr un mejor resultado en el secado de los oídos.

Y, como siempre recomendamos, ante cualquier dolor de oídos, lo mejor es abandonar la actividad en el agua. Si el dolor o la molestia persisten, habrá que visitar al médico para que valore el problema y lo trate de manera adecuada.